Entrenar sin motivación...compensa?

La respuesta es clara: SI ROTUNDO.

Entrenar es un desafío al cuerpo; Entrenar sin motivación es un desafío a la mente. Y si aceptas el desafío, fortalecerás tu mente. Así de simple.

No dependas a que llegue la motivación y enfócate en la disciplina y la constancia:
- Establecer una rutina clara y fija horarios . A veces, solo ponerse la ropa de entrenamiento y empezar, aunque sea con poca energía, es suficiente para generar impulso.
- Visualizar tus objetivos cuando no te sientas inspirado. Si un entrenamiento completo parece abrumador, comienza con una pequeña sesión que es más de lo que pensabas hacer.
- Variar tus rutinas o entrenar con un amigo puede hacer que el proceso sea más llevadero.

Y recuerda hay días en los que darás más que otros, no te castigues… simplemente hazlo con control y llega donde puedas sin lesionarte… los días buenos compensan los días malos, pero los días que no lo intentas son días perdidos.

¡A por ello!